Tenue, luces, casi amanecer.
Entre la noche y el día.
Que no corra el tiempo.
Unta de magia la vida.
Inventa belleza.
Escoge la paz.
Rodéate de ti, y
Ocupa el universo.
Llega el otoño amarrado a tu pelo, deshojando árboles, despertando amores, meciendo tristezas. No sabe que quedará atrapado por tu mirada para siempre, y lo harás tan bello, como como los amaneceres que tiñen de naranja tu piel. Una retahíla de pecas, acampando en tu cuerpo, y una sonrisa eterna, alumbrando tu rostro. Si, llegó el otoño, pero tú llevas pintando de naranja mi vida desde siempre.
Feliz cumpleaños primica. Ya sabes como termina esto, aunque en realidad, esta vez, comenzó así…