No, todo esto no ha sido idea de la inteligencia artificial. Ni los juegos, ni las risas, ni las palabras. La IA no siente esa ilusión cada mañana por verte antes de ir a trabajar, ni el orgullo de jugar contigo cada lunes al pádel o cruzar la meta de la mano juntos al término de la carrera de los Secaderos año tras año. Los sentimientos no se impostan, ni se copian, por eso estas lágrimas y estas palabras de agradecimiento al acabar unas olimpiadas que nos han llevado tan lejos. El mejor viaje? La vida a tu lado. La mayor meta? Seguir junto a ti. La mayor alegría? Verte tan bien. Has sabido siempre darme buenos consejos, apoyarme, aunque no llevará razón pero haciéndomelo saber. Me has mantenido a flote y me has soportado erguido. Me has arrancado una sonrisa y me has sacado de mis casillas. Tanto y tanto, que faltarían mil relatos más para explicarlo, aunque tú sabes bien de lo que te hablo. Por todo ello, gracias. Porque jamás un medio fue tan importante. Unión entre la base y la punta, haciendo de pegamento para que nada se resquebraje, para hacer más fuerte esta unión fraternal. Y al igual que a mi, jamás has dejado a la deriva al pequeño, sufriendo y luchando con él hasta ayudar a convertirlo en la maravillosa persona que es hoy. Papá estaría orgulloso de ti y mamá, por mucho que te pelee, no puede vivir sin ti. Deja de chicharle que cualquier día verás… Va llegando el final y por si no te has dado cuenta, no hemos hablado de algo. Los pellejeros aún no aparecieron, aunque siempre están. Aquella pequeña y loca idea hoy es algo tan grande que solo sus componentes la entienden. Por aquí andamos algunos, otros están casi por regresar, y en nada volveremos a estar completos, en nada volveremos a cumplir el sueño de uno de los nuestros. Somos parte de todos los aros olímpicos, porque somos amistad, sueños, metas, logros, pasión, alegría, aventura y viajes. Pero sobre todo, pellejo, pero sin trampas, por favor. Arrancas nueva etapa, quizás más tranquila, más plena, todo depende de ti. Pero hagas lo que hagas a partir de ahora, sigue contando conmigo siempre, porque siempre estaré a tu lado, o más bien tras de ti, aunque sea tu hermano mayor.