La playlist

Volamos dirección Santiago de Compostela, un poquito más cerca de ti. Imagino que desde ahí arriba todo se ve más pequeño, con mejor perspectiva pero ahora ya nada importa.

Hace poco más de un año que la enfermedad te alcanzó. Has bregado contra ella todo este tiempo, con la ilusión por delante, pero no pudiste derrotarla. Vino la muerte a buscarte y a pesar de tanto “no”, te ha llevado de su brazo. Demasiado pronto, demasiado rápido, demasiado todo. Quedamos aquí los vivos, recordándote, a ti y tus recuerdos.

Roma no es la misma sin ti. Ha quedado tan huérfana de tu sonrisa como nosotros, y en Galicia, a dónde me dirijo, conociste a la que hoy es nuestra amiga. Tú nos uniste y ese lazo es ya indisoluble.

Sigo durmiendo junto a tu atrapa sueños que reposa en la mesita que pega a la ventana, iluminando los días, protegiendo las noches, tratando de amarrar los sueños a la realidad y que no se pierdan en el olvido. Ahora formas parte de ellos. Te recuerdo con una sonrisa en la boca, con lágrimas en los ojos y la incredulidad de saber que nunca volveremos a vernos. No, la vida no es justa, y en algunos casos, la muerte tampoco.

Se quedó en el tintero tu regalo de cumpleaños, envuelto, sin entregar; la cena en el restaurante que tú debías elegir. Jamás sabré a cuál querías ir. Y quedó incompleta una playlist que fuimos ampliando desde que todo empezó, con la esperanza de seguir agrandándola lo máximo posible. Hace muchos días que ya no suena…

Pd: Para Patricia.

DP

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Solve : *
6 + 29 =